Hoy me he dado cuenta de que mis opiniones también varían con el paso del tiempo. Lo que hace algún tiempo me parecía de un blanco brillante, se ha ido tornando a gris, cada vez matices más oscuros. No llega a negro porque sigo manteniendo unos principios básicos, pero es impresionante como cambian las cosas desde hace un tiempo a ahora. Incluso, hay veces que leo fragmentos que había escrito anteriormente y no me siento identificada… Llego a ruborizarme. No sé, supongo que tienen razón y que nada permanece constante. Pero todo, absolutamente todo, conserva su esencia. Hasta mis ideas lo hacen…